La elegancia de las tarimas de madera modificada térmicamente radica en la belleza de la estructura de madera.
Un innovador proceso de termotratamiento da como resultado productos que son altamente resistentes a la putrefacción sin sacrificar la resistencia o la flexibilidad, productos con una longevidad extraordinaria.
La madera termotratada es muchos más resistente, dado que es alterada sin químicos.
El proceso de termotratamiento consiste en calentar la madera a muy alta temperatura (entre 190 y 230°C) lo que aumenta considerablemente su durabilidad y estabilidad.
Tarima de pino; Color natural claro, nudos distintivos y resistencia a la putrefacción.
Pino silvestre (conífera) procedente de Escandinavia